Virpi Pahkinen, artista experimental durante toda su carrera, la finlandesa visita a México de nuevo con su singular forma de bailar. Es una bailarina tan especial que fue seleccionada para bailar al lado de Ingmar Bergman en varias puestas en escena. Al mismo tiempo se destacado tanto en la video danza como en cortos y documentales de cine. Es esta ocasión presentó Aajej, que habla del viento; de la brisa nórdica que hace un vuelo azul, del viento suave y tibio de las dunas, del feroz y electrificarte que forma tornados.
Como parte de los invitados de honor Suecia, los países nórdicos, al representar el desierto en tal expresión única y precisa, afortunada, que llamó la atención ante la corta temporada que presentó en el Teatro Principal de Guanajuato en el 39 Festival Internacional Cervantino.
Una coreografía que hace el trabajo de varios años de trayectoria de una de las grandes piezas de la cultura de estos países, con la música de Jonas SjÖblom, instrumentando en vivo y un vestuario que se asimila correctamente en cada posición mostrada en los trazos que hacen como capricho al asistente se deshaga y vea, el gran talento de Suecia.
Sin duda, para pertenecer al programa del Cervantino se necesita una gran capacidad y una cierta calidad, ya que por lo general son eventos fascinantes, que se vuelven únicos y muchas veces programas especiales para esta fiesta, son irrepetibles.
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