El futbol está de luto. Uno de los personajes más emblemáticos y queridos del futbol mexicano, Melquiades Sánchez Orozco y quien fuera la voz oficial del Estadio Azteca, falleció este domingo a los 90 años de edad.
Así lo confirmaron en el programa La Jugada de grupo Televisa, empresa para la que trabajaba.
Fue la voz oficial del “Coloso de Santa Úrsula” desde su inauguración en 1966 y el año pasado recibió y un homenaje previo a un partido entre América y Cruz Azul.
Lo primero que la gente escucha cuando llega al Azteca es la voz de Melquiades. Minutos antes de que inicie un partido, el legendario locutor hace vibrar a las masas cuando, pausada y metódicamente, recita las alineaciones de los equipos. Es a partir de ese momento que el ambiente en el estadio que ha sido escenario de dos Copas del Mundo cobra magia.
De todo el trabajo que él realiza desde su cabina instalada en el nivel de palcos del inmueble, lo que más ha dejado huella entre los aficionados es el anuncio que Sánchez Orozco hace cada vez que cae una anotación.
Originario de Tepic, estado de Nayarit, Melquiades se inclinó desde muy joven por el arte de la pintura y por la electrónica. Nada hacía suponer que dedicaría su vida a los medios de comunicación. Pero cuando a los 18 años de edad queda huérfano, recibió, sin saberlo, la señal que cambiaría su destino.
“Como me gustaba tanto la electrónica y además era muy curioso, un día decidí visitar la emisora de radio de mi ciudad para ver si me dejaban entrar a ver cómo funcionaba el sistema de transmisión” y desde entonces se empezó a escuchar la voz que transmitió tantos goles para el equipo América, Atlante, Cruz Azul entre otros.
Orgullo nayarita, Descanse en Paz.
Orgullo nayarita, Descanse en Paz.
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