La semana santa fue elevada a la máxima expresión católica a través de una tradición que por varios años se lleva a cabo en nuestra ciudad, el vía crucis tradicional que suele organizar los templos de la catedral y de la santa cruz de zacate, en el que la solemnidad de los días en Jesús hijo de Jehová, fue crucificado y resucitó al tercer día, hacen que el respeto y admiración de muchos caiga en cada año.
A diferencia de otros años, tal parece que ahora muchos ciudadanos hicieron el esfuerzo por tomar vacaciones o pasar los días santos desde sus localidades o colonias, pues que se vio menos gentes que otros años.
Aunque el viacrucis, mal organizado, no brillo, el detalle era repasar cada momento vivido hace dos mil años, sin embargo, la marcha del silencio cada vez se convierte, en una gran tradición que no solo atrae a los ciudadanos locales, sino que también al turismo nacional que hace presencia en Tepic y que llega constantemente en la Riviera Nayarit, aunque, la Judea en Jala y San Pedro Lagunillas, son fuertes atracciones y tradiciones de nuestro estado.
Se espera que en años próximos la sociedad se coordine, para lograr un gran evento, en el que se involucren todos juntos, combinando la expresión eclesiásticas con los recorridos de los templos, recorridos de leyendas, música por todos lados, un violín en la esquina de México y lerdo, cada diez metros, una marimba, show de tambores, una mariachi, una banda, flautas barrocas y que Tepic se caracterice por hacer un festejo en estas fechas y así reanimar a los cientos de turistas que llegan a nuestra ciudad, puedan regresar con más gusto.
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