Texto: Robin Zavala
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Una de las empresas más importantes del estado en cuestión de modelaje, pionera en poner los rostros más bellos de la ciudad en los mejores eventos y como imagen de las mejores marcas, cumplió en días pasados su quinto aniversario de ser creada y para esto celebró lo dispuesto con un desfile de modas de diversas marcas.
Fantasía de Otoño fue el titulo a tan desatado festejo de prendas, con la más diversa variedad de color y estilo, toda la novedad del 2011, en nuestra localidad, resaltando siempre la calidad de las mejores marcas y sus diferentes líneas de ropa.
Al final de la presentación Liz Borrayo agradeció a los presentes estar en el desfile, así como la permanencia de estar durante cinco años presentes, en los mejores eventos, como en la de estar en la preferencia de empresarios y de las mejores campañas publicitarias, que a través del tiempo han optado por dar una oportunidad a TAMDEM y a su talento, ya que cuenta con un buen numero de personalidades que están en sus filas.
Todas las personalidades que han estado o que están en esta agencia se derivan de contener la pura calidad, con la mejor escuela que hoy desempeña, esta empresa como una propia institución de enseñanza y adiestramiento, como pocas en la región.
Con un único tacto al realizar un evento en el salón de eventos más importante de la ciudad, con una atmosfera un tanto creativa, siempre con la firme intención de innovar y causar precedentes.
Sin duda nuestro estado le faltan muchas cosas en las que vamos atrasados, los festivales culturales, las ferias del libro, las expos de modelaje, los encuentros educativos, el desarrollo de nuevos y mejores productos, quizás es un momento para reflexionar, parar y aplaudir para todos aquellos que están picando piedra y que llevan un pie, una mano de esa gran escultura… quizás es el tiempo de mirar a tu lado y apoyar a tu enemigo, aunque este no sea tan potencial como tú, o sea mejor que tú, lo más importante es parar, quizás y así podamos caminar a la velocidad en que camina un mundo globalizado como el nuestro. Ante este esfuerzo, me pongo de Píe y doy un fuerte aplauso, que se lo merecen, a Liz y por supuesto a todo su equipo de trabajo, que nos es fácil sobresalir en este mar de negatividad, ante inseguridad, injusticias y las pocas ganas de hacer las cosas bien, solo porque así nos apetece. 
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